Con deseo de simplificar su vida, una pareja acudió a nosotros para ayudarlos a acomodar su hogar -anteriormente albergado en un espacio sobrado en un edificio de dimensiones mas compactas.
El reto fue renovar el edificio manteniendo la estructura original, ya que se encontraba en un área protegida por el INAH.
Al ser un espacio pequeño, se buscó sacar el máximo provecho de todos los rincones disponibles. Cosa que fue posible gracias al uso de muebles integrados al edificio y al uso de tragaluces.
También convertimos el espacio exterior del comedor en uno interior bien iluminado, utilizando un domo con filtro solar. De éste modo podríamos tener un comedor a cielo abierto, que disfrute de la luz, pero evite el calor.